El Ángel de la Gaceta
2 de mayo de 2024
Por Ángel Dehesa Christlieb
Atenta invitación
No sé si lo sepan, pero el queridísimo Alejandro García “Virulo” y quien esto escribe estamos fraguando “De Herencias y Querencias: Recordando a Germán Dehesa”, un espectáculo que presentaremos en el Foro ExpresArte de la Librería Gandhi de Miguel Ángel de Quevedo, este 14, 15, 21 y 22 de junio.
Creo justo señalar que este proyecto se dio gracias a que Virulo, quien insistió e insistió para que lo hiciéramos porque yo, durante muchos meses, apliqué la de Hamlet: hacerme el loco, aterrado por aquello que en el Tarot se llama “El Diablo”, esa parte de mi mente que concibe los escenarios más catastróficos y me los muestra en imagen tridimensional y sonido envolvente.
Mi Diablo personal tiene un aspecto parecido a Layda Sansores acabada de levantar y me decía, mientras bailaba el paso del Jaguar, que hacer el show era admitir que yo no valía por mi mismo y explotar el legado de mi padre como una hiena carroñera.
Gracias a la amorosa, paciente e implacable insistencia de mi cubano favorito, mandé al campechano chamuco de puntitas al rancho del presidente.
Las palabras de mi papá me resultan entrañables y vigentes, el compartirlas con la gente que lo quiso y lo quiere es un acto de generosidad, no desde la superioridad, sino desde la complicidad y el cariño.
Previa adquisición de una abundante dotación de pañuelos desechables, comencé a leer, seleccionar e hilar varias de las muchísimas columnas que mi prolífico progenitor es en diversos medios impresos.
Los pañuelos desechables se terminaron, pero entre los mocos y las lágrimas, se fue también el miedo a ser quien soy, a hacer lo que me gusta y a la opinión de los demás.
Comencé a escribir esta columna, no como un “homenaje” o para “honrar” la memoria de Germán Dehesa, no lo necesita.
Quien lo necesita, lo disfruta y lo agradece soy yo, escribo cada día para estar feliz, para dejar mis demonios en las teclas y para compartir lo más valioso que tengo, mi vida, mis experiencias y mis opiniones, en el afán de iniciar una conversación y que nos volvamos amigos, nunca desde la pretenciosa superioridad de quien se cree dueño de LA verdad y es capaz de alegar que tiene “otros datos” incluso cuando le dicen que tiene abajo la bragueta.
Me gusta mucho recibir sus comentarios, con acuerdos y discrepancias.
Estoy firmemente convencido de que quien escucha aprende y quien solo habla, tarde o temprano, se volverá como un hámster en una rueda, corriendo en infinitos círculos sin llegar a ningún lado.
Así que, por todo lo que ha significado en mi vida, “De Herencias y Querencias: Recordando a Germán Dehesa” es ya un éxito para mí, pero Virulo y yo estamos haciéndolo con mucho amor, calidad y, sí, también tenemos cuentas por pagar, por lo que sería padrísimo que fueran a vernos y pudiéramos abrazarnos en vivo y en directo.
Aquí no es Palacio Nacional, sí hay estacionamiento, sí pueden traer celular, a todos los acompañantes que quieran y no necesitan credencial de legislador.
Les dejo la liga para la venta de boletos, será un gusto vernos ahí.
Abrazo amoroso
A mí hermanita Viviana Motta Murguía, mi vida y la de muchos es más hermosa porque tú existes.
Siempre Juntos.
Cualquier correspondencia con esta invitadora columna, favor de entrar al www.angeldehesac.com y dejarme un mensaje, las mentadas diríjanlas a la página del América, están acostumbrados.
Compártanla en sus redes, plataformas, cuelguen una manta junto a la de su candidato favorito, les dejo un enlace para que lo hagan.
2 comentarios
En hora buena Angel, que gran noticia no puedo esperar a adquirir el libro, yo me encuentro en Mty NL. Así que no podré asistir, estoy seguro que va a ser como decía mi Tío Germán, “un apapacho jarocho” “un libro es como un espejo y el libro que más nos gusta es el que nos refleja mejor” Germán Dehesa es mi escritor Favorito. Muchas felicidades a Virulo y a ti mi querido Canito, que sigan las risas y el recuerdo perpetuo de mi tío Germán.
Espero que tengas tanto o más éxito que nuestro bien recordado y querido Germán Dehesa!